MI MADRE ME DIJO UN DÍA
Mi madre
me dijo un día:
“Hijo mío,
cuando viniste a este mundo
sentí un relampagueo en los ojos”,
y mi madre sabía que la conocía.
No la miré a los ojos, desconocía su color,
debían ser negros.
Aún siento cada tarde la bendición
de sus lágrimas derramadas por mí.
Yo, el hijo perdido, el pobre,
el extraviado entre los cielos de los continentes
como estrella errante.
Mi madre
me dijo un día:
“Hijo mío,
cuando viniste a este mundo
sentí un relampagueo en los ojos”,
y mi madre sabía que la conocía.
No la miré a los ojos, desconocía su color,
debían ser negros.
Aún siento cada tarde la bendición
de sus lágrimas derramadas por mí.
Yo, el hijo perdido, el pobre,
el extraviado entre los cielos de los continentes
como estrella errante.
FELIZ DIA MAMÁ